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CIRUGÍA DE LA MIGRAÑA

La migraña afecta al 12% de la población, siendo más frecuente en mujeres.

Los pacientes con migraña requieren una combinación de medicamentos y conductas para el control de los síntomas. Asimismo, existe la terapia farmacológica estándar que incluye tratamientos profilácticos, tratamientos abortivos agudos y analgésicos agudos.

Actualmente, han crecido los estudios e investigación sobre el tratamiento quirúrgico de la migraña que muestran resultados más efectivos. Por ejemplo, la toxina botulínica ha sido aprobada como una terapia preventiva eficaz para la migraña crónica.

Cirugía de migraña

La Cirugía de la Migraña incluye la descomprensión de alguno de los potenciales puntos gatillos o desencadenantes que inician el dolor de cabeza, por irritación nerviosa, distribuidos en cuatro áreas periféricas.

Así, los pacientes candidatos a una cirugía son aquellos que ven su calidad de vida afectada o son:

  • Pacientes con efectos adversos a los medicamentos tradicionales.
  • Personas con contraindicación sobre su uso.

El paciente debe ser evaluado de manera exahustiva, a través de un examen físico detallado y, eventualmente, realizando sesiones de quimiodenervación con toxina botulínica para identificar y comprobar qué sitios gatillos están afectados en la migraña.

Esta información nos permite saber cuáles son los sitios que serán tratados en la descomprensión quirúrgica. Como alternativa, se puede realizar un bloqueo de nervio periférico diagnóstico con anestesia local para localizar los sitios gatillos susceptibles a descompresión. Adicionalmente, una tomografía computada y una evaluación con doppler manual son parte del estudio diagnóstico.

Los beneficios de la cirugía, en pacientes seleccionados son:

  • Eliminación o reducción de los síntomas en cerca de un 90%.
  • Menor gasto debido a medicamentos, consultas médicas y ausencias laborales por dolor.
  • Alta tasa de éxito ya que la cirugía desactiva los sitios gatillo que originan el dolor.
  • Mejora en calidad de vida.

Los riesgos de la cirugía son: hipoestesia transitoria o parestesias en la zona operatoria, alopecia donde se realizó la incisión, sangrado intraoperatorio controlado y movimiento asimétrico transitorio de las cejas.

¿Cómo saber si es migraña?

La migraña es un trastorno neurovascular que se caracteriza por episodios de cefalea de 4 a 72 horas de duración y cumple con ciertos criterios como: dolor unilateral, tipo pulsátil, intensidad moderada o severa, con ciertos agravantes (ej. Actividad física) y se acompaña de náuseas y/o vómitos, fotofobia y fonobofia.

La migraña crónica es cuando los episodios de cefalea ocurren durante 15 o más días más mes durante más de tres meses, de los cuales 8 de los 15 episodios cumplen con los criterios de migraña.

Las áreas principales de la migraña incluyen la zona frontal, temporal, occipital y nasoseptal:

Zona Frontal: El dolor comienza sobre las cejas, da durante la tarde, puede existir ptosis palpebral de lado afectado. Este puede ser desencadenado por estrés y la aplicación de comprensas frías o calientes ayudan a aliviar el dolor.
Zona Temporal: El dolor se produce en la sien y se presenta comúnmente cuando el paciente despierta con dolor luego de apretar los dientes durante la noche por ello se asocia con el desgaste de las fascetas dentales. También en este caso la aplicación de comprensas frías o calientes pueden ayudan al dolor.
Zona Nasoseptal: El dolor se da detrás de los ojos por las mañanas o noches y puede darse por cambios de clima. El dolor puede ir acompañado de rinorrea del lado afectado y se asocia a la rinitis alérgica. El dolor se ha descrito como “explosivo”.
Zona Occipital: Se puede producir durante cualquier horario, el ejercicio intenso es un factor. El presionar la zona afectada puede detener el dolor, así como la aplicación de frío o calor.

Revisa aquí el testimonio de Daniela Barra, quien se sometió a una cirugía de migraña.